“De hecho somos responsables ante el FSC de acatar los estándares. Los del FSC verifican las condiciones de nuestros trabajadores, así como las condiciones de la fauna silvestre.”
El día en que Abraham González Sosa fue elegido presidente del Ejido No-Bec, una comunidad forestal certificada FSC, ni siquiera se había presentado como candidato. El era el encargado de dirigir el aserradero de la comunidad y acababa de acudir a la elección para ver quién sería el ganador. Más tarde esa noche, la comunidad de más de 200 hogares acordaron por unanimidad que Abraham sería el líder perfecto para representarlos. Hoy en día, él encabeza las actividades forestales, además de representar a la comunidad en calidad de presidente.
Más del 90% de los ingresos de la comunidad provienen del bosque aledaño y del aserradero, ambos certificados FSC. La comunidad es dueña de la tierra y todos obtienen una tajada de las utilidades. El bosque y el aserradero certificados FSC emplean alrededor de 100 personas, también generando ingresos.
Para explicar lo que el FSC ha significado para la comunidad, Abraham destaca tanto al manejo forestal como a las condiciones laborales: “La certificación FSC ha significado acceso a nuevos mercados e ingresos adicionales para los trabajadores. En general, en nuestro aserradero pagamos a un trabajador un salario tres veces mayor al local,” nos dice.
“Desde la perspectiva forestal, hemos aprendido mucho de la certificación FSC. Las visitas del FSC y de los auditores significan que hemos aprendido a extraer madera de forma responsable, tanto en términos de la importancia de la seguridad de nuestros trabajadores, como en cuanto a minimizar el daño al medioambiente aledaño durante nuestras actividades.”
Según Abraham, un aspecto importante de la certificación FSC es el monitoreo de las actividades a través de las auditorias FSC anuales.
De hecho somos responsables ante el FSC de acatar los estándares. Los del FSC verifican las condiciones de nuestros trabajadores, así como las condiciones de la fauna silvestre. En esta zona, tenemos muchos jaguares y, como parte de nuestra certificación FSC, tenemos que llevar registros de la fauna silvestre para comprobar si la población está afectada.”